02 noviembre 2006

Circa


Tal vez
desde un lejano paraíso
-el pecado, el inicio-
la condena del vientre
a ras de tierra
sinuoso el modo
elíptico
de llegar donde llega
un rastro
ondas
la efervescencia instantánea de la espuma
inquieta cuando asoma
sobre la línea distante de los ojos
te llama ese destello, en fondo oscuro.
No ha de quedarse aquí
su fingido furor
se desvanece
a unos pasos del muelle en que lo miras.

1 comentario:

Anónimo dijo...

te leo, Inés...ya sabés cómo disfruto de tu poesía, pero nunca se me ocurre que decir, tal vez es lo mejor que puede pasar
Un beso