LOS ARBOLES Y EL BOSQUE
Siempre que leo o escucho hablar de Marcel Proust - y esto no es para nada frecuente- me pregunto por qué razón no se lo lee como yo lo leo.
En general, los críticos rescatan de su obra la descripción que hace de los salones literarios del París de su época (donde se daban cita la burguesía ilustrada, el poder político y las hilachas de un poder monárquico ya próximo a la extinción) o su postura política en la mención atenta del famoso "caso Dreyffus" que trata pormenorizadamente en alguno de los 7 tomos, o la borrosa paternidad de lo que alguien dio en llamar la "novela psicológica" o "introspectiva".
Yo creo que el gran tema en Proust es el amor, el amor y el enamoramiento. Quienes no empiezan por ahí -no diré que están ciegos- pero sí tuertos, o son estrábicos o daltónicos, al menos.
Y no sólo creo que el amor es su gran tema, me atrevería a decir que es su único tema. Lo demás, es relleno, la concesión que cada gran escritor le hace a la literatura, el precio que paga por compartir sus obsesiones con un lector, la ofrenda a la forma, el peaje por vivir su tiempo. Yo leo eso.
29 junio 2005
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10 comentarios:
el amor... y ¡los celos!. que en definitiva forman parte de lo mismo.
y eso es, por cierto, mucho más interesante que los detalles del caso dreyfuss o las descripciones de los cuadros de eltsir o las composiciones musicales de... ¿cómo es llamaba?
nunca se me ocurrió ninguna lectura de proust que no fuese desde esa clase de pasión morosa. Amor del único bueno: sin prisa y sin pausa. Llegué inx hasta acá veré si puedo hacer un link a tu blog desde el mío.
Qué bueno, ya me siento un poco menos sola. ¿Será una cuestión de género, chicas?
no, no creo. conozco algún hombre que ha leído a proust desde costado. bah, uno solo... será una excepción?
Sí, Jime. Yo no he sido.
Una vez soñé con Proust y era ni más ni menos que el amor parado delante de mí.
Ni un beso nos dábamos, no hacía falta.
Qué bárbaro. Yo una vez soñé que venía Beethoven a mi casa a afinarme el piano. Y yo me moría de vergüenza... (creo que era la época en que Beethoven no estaba sordo del todo).
En fin.
Ah, con respecto a Proust... quise decir "desde ese costado". En realidad... era una persona que sufría de celos igual que él en La Prisionera.
Inés, me están dando ganas de releer!!!!
Un beso,
INES PRESIDENTE !!!
Usted no sabe lo que dice. Entrariamos en guerra con el universo. Los rivales mas duros, seguramente el mundo arabe
Salvemos a los sufís.
Y por favor, no me incite tanto a viajar por obra que toca tanto, porque aquí, sabe, hacer muuucho calor, y para eso, lo mejor es Tomatito, una sangría, y AYYYYYY el resto de verano.
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