16 septiembre 2006

Play. Stop. Rewind


Cada instante
excava un cementerio imperceptible
que guardará algún día nuestros huesos
-aquello que en nosotros
imita con torpeza
el arte de la piedra-
dónde irán estas almas
a cuántos pasos
del confín de la tierra
quedarán detenidas
en qué voces
irán a dar los ecos
qué memorias
rescatarán las barcas del sentido
del tormentoso mar de las palabras
-aquellas que dijimos
y las que hemos escrito-
qué ojos
custodiarán entonces
la belleza, el horror que concebimos
con los ojos de ahora.

Una serie de círculos
rodean y conforman el espacio creado,
abanicos y anillos alrededor de un nombre
portales del infierno
o arrabales del cielo
en las extrañas manos del amor de los otros.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

"aquello que en nosotros
imita con torpeza
el arte de la piedra"

¡me ancantó, Inx!

Y qué imagen tan sugerente

inx dijo...

Gracias, Pablo, pero ¿leíste lo de Benjamin y lo de Chuang Tzu?