22 noviembre 2005

Orden del día


Cartas
ajadas por la mano sudorosa.
La lágrima oportuna
vuelve mancha
una palabra decisiva
en vilo
en vela
ve las cartas como piezas
las ordena
sobre el desorden solitario de las mantas
que no tiende ni arruga más amor.
Todo es lejano
hoy
todo al fin es lejano
esta mañana se parece a una de ayer
pero entonces
no habría este dolor
de papel ordenado
con manchas de otro amor
con palabras confusas
no sería posible
en vela
en vilo
derramarse al vacío
abierto entre los dedos
los dedos ciegos que modelan en la sombra
del cuarto del hotel
esas formas que son
hoy por hoy
lo perdido.

1 comentario:

Mónica Sabbatiello dijo...

Cuenta tanto con esto que dice. Insinúa tan bien. Transporta, coloca la consciencia en ese lugar, en estado, en ese sentir.